domingo, 28 de febrero de 2016

El obrero no quiere perder su espacio.
El obrero no quiere dejar la borrachera de fin de semana
jugando al dominó o apostando a los caballos.
¿Que lo explotan?
El ni sabe lo que es ser explotado.
No tiene conciencia de ello.
Tampoco el empresario, su patrón, la tiene.
El que tiene conciencia de la explotación a que el obrero es sometido
es el dirigente social
el sindicalista
aquel que quiere ser burgués pero no tiene los recursos necesarios
y, del mismo modo que el patrón, pero a conciencia,
le vive su trabajo.
Y es más sanguijuela que el patrón
Porque mientras el patrón le paga por trabajar
-por más injusto que el salario sea-
el sindicalista, por lo mismo, le cobra.
Mientras el patrón le da el pan a cambio de su trabajo
el sindicalista se lo come a cambio de nada.
Ese es el verdadero gusano explotador.